Huevos 4 Azúcar 4 cucharadas soperas rasas Fécula de maíz 4 cucharadas soperas Miel media cucharada Vainilla Polvo de hornear 1/2 cucharadita
Paso a paso
Batir los huevos con el azúcar hasta que queden bien espumosos y el azúcar apenas se perciba
(punto letra), añadir 1 cucharadita de la esencia de vainilla y la miel y seguir batiendo unos minutos más, lo ideal
es hacerlo con batidora para que quede la consistencia ideal.
Tamizar aparte la fécula de maíz junto al polvo de hornear, e incorporar a la mezcla líquida
mezclando en forma envolvente para que no se baje la mezcla aireada.
Enmantecar un molde rectangular de unos 35×45 cms, y forrar con papel de horno .
Verter la mezcla sobre el molde.
Precalentar el horno a 200 grados.
Hornear unos 8 minutos siempre depende también de la potencia de tu horno, pero no llevará
más de 10 minutos de cocción.
Inmediatamente sacar del horno, lo podemos enrollar con el mismo papel de horno o
desmoldar sobre un repasador húmedo. Dejar enfriar por completo hasta el momento de
rellenarlo con los ingredientes que más nos agraden.